Por: Politi Quero
Las promesas politiqueras
Hay algunos politiqueros a la
alcaldía de Bucaramanga que están ofreciendo el cielo y la tierra para cautivar
a los incautos.
Esas promesas de devolver la
valorización son ofensivas porque demuestra que está ignorando la realidad
presupuestal del municipio. Ofende porque es considerar a los electores unos
borregos, y además es volver a la politiquería del siglo pasado donde los
candidatos dragaban donde no había ríos.
Esas promesas que parecen más
chistes flojos, deben merecer el rechazo de los ciudadanos.
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La falta de ética política
Decirle a los electores mentiras,
es ir al pasado y demostrar falta de ética política. Esos candidatos que ignoran la realidad de donde viven no merecen confianza popular.
Anunciar devolver inversiones
que se han hecho, es regresivo. O será
que va a reajustar otros rubros como el impuesto predial para conseguir fondos
para hacer devoluciones? De lo contrario
es una gran mentira, al no ser que el candidato sacrificara sus propios bienes
para cumplir su promesa.
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Las acciones positivas
Y en política se han logrado
avances muy positivos. Hay candidatos que en cambio de decir mentiras a la
comunidad, llegan con hecho.
Un candidato a la alcaldía de
Floridablanca realizó una jornada de vacunación de felinos y caninos. Esas si son
acciones positivas, mientras otros se dedican a incomodar a las
comunidades taponando vías con desfiles que
igualmente ofenden por la contaminación sonora y contaminación de
las vías.
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El respeto a los electores
Algunos políticos les falta
mucho y pierden las proporciones; en cambio
de presentar propuestas resultan insultando a sus rivales y despertando odios
entre el potencial electoral. Despierten
señores políticos que ya estamos en el Siglo XXI. No consideren a los electores
ignorantes, respeten al ciudadano y no digan mentiras.
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